La Suprema Corte obligó a cerrar el predio, controlar el acceso, establecer un sistema de iluminación, señalización y medidas de desinfección. “Empezamos a cumplir los puntos de la sentencia”, aclaró ante LA CAPITAL, la directora de Medioambiente, Romina Castro.
MIRAMAR (Corresponsal). – A poco más de 10 meses cuando se conoció que el Juzgado en lo Contencioso Administrativo N° 2 de Mar del Plata hizo lugar a un amparo colectivo y ordenó al municipio de General Alvarado que en un plazo no mayor a 90 días disponga el cerramiento y medidas de control en el predio de residuos, la Suprema Corte de Justicia rechazó los últimos recursos y dispuso que se cumpla con esa directiva.
Cabe señalar, que los abogados Enrique Arolas y Jorge Mazzoni fueron quienes promovieron la acción de amparo contra la comuna.
En el escrito, solicitaron la clausura y/o erradicación del basural que funciona a la altura del kilómetro 7,5 de la ruta provincial 77, aduciendo que desde hace más de 10 años se depositan allí diariamente residuos, sin ningún tipo de tratamiento, lo que genera una grave preocupación atento a la falta de salubridad y la afectación del equilibrio ambiental de la zona.
Ante este panorama, LA CAPITAL consultó a la directora de Medioambiente, Romina Castro, quien comentó las acciones que se están llevando adelante para regularizar la situación: “Pese a que cuando fue planteada la situación, conseguimos un efecto suspensivo, empezamos a cumplir igual los puntos de la sentencia, en su mayoría, realizando desinfección, cartelería, mejoramos iluminación. De hecho, tenemos el planeamiento de pre factibilidad que nos solicita el Ministerio de Ambiente”, dijo.
“Además, lo más importante, la obra de cierre técnico del basural y saneamiento y construcción de la planta de separación ya tuvo dos ofertas la licitación y está en evaluación del organismo competente para la apertura financiera”, agregó la funcionaria.
Cabe señalar, que la Corte Suprema recordó que la Cámara conservó la posición inicial más allá de las críticas del municipio.
“El predio es utilizado desde el año 2001 y una estructura colapsada por la propia lógica que importan más de 20 años de funcionamiento, con ingresos de 35 toneladas diarias de basura que, en temporada estival se elevan a más de 100, y la ausencia tanto de tareas de mantenimiento de las estructuras existentes como de la falta de construcción efectiva de nuevas celdas aptas para el relleno sanitario”, se especifica en el documento.
Con respecto a eso, Castro mencionó que “desde la comuna seguimos trabajando igual cumpliendo con la sentencia que era lo que teníamos que hacer, así que seguiremos avanzando en esa dirección”.